CHANTEIRO,
LA ERMITA Y SU “SANTIÑA”
Recientemente ha sido publicado el libro “Chanteiro, la ermita y su “santiña” del que es autor el amigo chanteirés Carlos R. Cartelle.
Tal como se deduce por su
título, es una publicación versada sobre Chanteiro, en su vertiente legendaria
de la Ermita de la Merced y su “Santiña”, que constituye una de las señas de
identidad de este lugar aresano, junto con la Playa, Montefaro, las baterías,
el paisaje, la costa y el mar.
Chanteiro es el “finis
terrae”, la parte última de la península de Bezoucos (Ares – Mugardos ). Después de Chanteiro, el mar. El inmenso Atlántico que da lema a nuestro
slogan de “Chanteiro, donde el Atlántico goza”, que pergeñamos allá por los
años setenta del pasado siglo XX.
NUESTRA AMISTAD
De Carlos R.
Cartelle sólo puedo, y ya es mucho
decir, que es el “amigo de siempre”.
Nacimos en Chanteiro el
mismo año, compartimos pupitre y aprendimos las primeras letras, los juegos y
las circunstancias de la vida infantil en el rural apartado e incomunicado de
aquel Chanteiro de la postguerra.
En la adolescencia nos
distanciamos, ya que yo por mis circunstancias personales de falta de movilidad
continué con mi aislamiento en Chanteiro, mientras los demás colegas salían a
estudiar o trabajar.
Carlos siguió estudios de
tipo Mercantil y Comercio en Ferrol, para después desempañar distintos empleos
en el mismo Ferrol y otras ciudades, para acabar estableciéndose en la capital
gallega de Compostela.
Pero en todos esos años
juveniles y posteriores no hubo un tal distanciamiento activo. Nos reuníamos en
cuanto fuera posible.
A Ferrol se iba y venía
desde Chanteiro todos los días. Y mientras yo me quedaba en casa, me iba
cultivando de forma autodidáctica, recibiendo las tremendas aportaciones que
Carlos me iba proporcionando de su aprendizaje en las academias y aulas que
nunca tuve ocasión de pisar.
Fue importante el avance
cultural que en sesiones memorables de un grupo de amigos, recibíamos los fines
de semana y por las noches en una de las bodegas de mi abuelo en el
Penedo. Era la bodega del horno y la “moa”,
el pequeño molino “ a mano”. Porque en casa de mi abuelo Rebón también otras
bodegas eran la fragua (forxa), la carpintería y otras.
En esa bodega que ya
bautizamos como “A Escola”, continué yo,
más tarde, dando clases modestamente a la “chavalería” de Chanteiro que ahora
mismo roza el medio siglo de edad.
Pues con Carlos y nuestro
esfuerzo llegamos a sacar el Bachillerato y Reválida por libre, cuando ya rondábamos
los 20 años.
Aprendíamos de todo,
hasta el “leguaje Morse” y la “taquigrafía martiniana”.
Hacíamos experimentos de física, montábamos cine con dibujos en tiras de papel, tómbolas y rifas, lecturas de todo lo escaso que caía en nuestras manos: Tebeos, chistes, aventuras, Roberto Alcázar y Pedrín, Jin Graves, Guerrero del Antifaz, libros de Julio Verne, Enciclopedia Pulga, Colección Austral y hasta el Teatro de los Quintero y de Alfonso Paso.
Hacíamos experimentos de física, montábamos cine con dibujos en tiras de papel, tómbolas y rifas, lecturas de todo lo escaso que caía en nuestras manos: Tebeos, chistes, aventuras, Roberto Alcázar y Pedrín, Jin Graves, Guerrero del Antifaz, libros de Julio Verne, Enciclopedia Pulga, Colección Austral y hasta el Teatro de los Quintero y de Alfonso Paso.
En esta foto todavia estábamos bastante bien, ¿verdad? |
No sigo, ….. porque son muchos los recuerdos que podría mencionar, …. Pero esos todavía los rememoramos y recreamos actualmente en las charlas de nuestros frecuentes encuentros, cuando revivimos el pasado, también el presente de nuestro entrañable Chanteiro.
También de la Comarca y
de Ferrol, compartimos pasado e
inquietudes.
Cada uno desde su punto de vista, ya que cada uno tiene sus convicciones y forma de pensar a veces totalmente divergentes, lo que no obsta para seguir con nuestra lealtad.
Cada uno desde su punto de vista, ya que cada uno tiene sus convicciones y forma de pensar a veces totalmente divergentes, lo que no obsta para seguir con nuestra lealtad.
¡Felicidades Carlos!, por
esta primera edición que sé tendrá
próxima continuación.
Romayo de Chanteiro.
Romayo de Chanteiro.
Páginas 62 y 63 del Libro |
No me gusta la Historia en general, pero ésta, tal y como la cuentas, puede resultar ilustrativa para tu aldea. Habrá que leerla, ¿Donde se compra?
ResponderEliminarG. Castro.